Más de 5.000 personas pedalean en el primer ‘Madrid Bike Tour’

Nov 14, 2008
  • Por 60 euros, cada participante se quedaba con la bici, el caso y la camiseta
  • Todas las plazas para participar se agotaron en el primer día de inscripción
  • El recorrido, de 13 kilómetros, comenzó en el Retiro a las 8.00 de la mañana

Los participantes del Madrid Bike Tour. (Foto: Kike Para)

MADRID.- Domingo, 8.00 horas de la mañana. Los termómetros marcan seis grados, Madrid aún duerme, pero 5.000 personas hacen cola en el Parque del Retiro a la espera de recoger una bicicleta. Equipados con camisetas naranjas, ropa deportiva, casco, guantes y bufandas, los participantes en el primer 'Madrid Bike Tour' recorrieron la ciudad sobre dos ruedas, en un trayecto de 13 kilómetros.

Con el lema "Disfruta y muévete sólo con tu energía", el Bike Tour ha sido organizado por el Ministerio de Sanidad y Consumo y por el Ayuntamiento de Madrid. El objetivo es promocionar la vida saludable, sin drogas, y movilizar a las personas que durante el año no suelen practicar ejercicio.

La iniciativa ocurre por primera vez en la capital española pero lleva ya dos años celebrándose en Portugal, el país pionero. Madrid ha sido la primera parada internacional del Bike Tour, pero otras ciudades ya lo aguardan, como Sao Paulo

(Brasil), que lo realizará en 2009. Francia, Hungría y Turquía también ya ha demostrado interés por el evento.

Las inscripciones para el evento se abrieron el 20 de octubre y, a los seis días, las 5.000 plazas disponibles se agotaron. Por 60 euros, los participantes conseguían todo y equipamiento necesario para participar: el casco, la mochila, la camiseta y la bici. El domingo, el Parque del Retiro ha sido el punto de partida de la carrera.

El ministro de Sanidad, Bernat Soria, fue uno de los participantes. Al final del recorrido, habría de admitir que hizo algunas cuestas a pie, bromeando que su objetivo era, como mínimo, llegar en penúltimo ya que su escolta, que va detrás, llegaría siempre después de él. Soria lanzó también un mensaje contra la droga: "Se puede pasar bien y ser feliz, sin drogas, sin alcohol y sin tabaco".

Pedaleando por Madrid

Bernat Soria. (Foto: EFE)

Ni el frío o el madrugón los hicieron desistir. A la hora marcada, miles de personas teñían de naranja el Parque del Retiro. Alicia e Inés, de 23 años, aún reflejan en los ojos y en los bostezos, las señales del madrugón: "Estamos aquí porque nos han engañado para hacer deporte. El culpable estará ahí en la cola", bromean. Vinieron en un grupo de amigos para aprovechar el plan dominguero y para conseguir la bici, claro. "Me gusta el deporte y esta es una buena manera de conseguir una bici y de poder pasear por Madrid de una forma distinta también", explica Alicia.

Unos vienen solos, otros con amigos y hay incluso familias enteras. Jorge, de 12 años y Álvaro, de 14, han venido con su padre. "Ha sido peor que madrugar para ir al colegio, pero merece la pena para montar en bici y dar una vuelta", dice el más pequeño. Esperan en la cola a que le entreguen la bici y no tienen ninguna duda de que van a poder llegar al final del recorrido: "Queremos llegar a la meta, claro. Al menos lo intentaremos, lo intentaremos…", dice Álvaro.

Además de los participantes oficiales hay otros muchos que se han acoplado a la multitud que se desplazó desde el Paseo de los Coches, en el Retiro, hasta el Paseo de Camoens en el Parque Oeste, en una ruta que mantuvo el tráfico del centro de Madrid cortado durante casi dos horas. Cogieron sus propias bicicletas o los patines y se unieron al recorrido. "Yo suelo patinar y aproveché el evento. A los que nos gusta pasear sobre ruedas por la ciudad nos faltan más oportunidades como esta", dice Inmaculada.

Pese a las cuestas del recorrido y a un que otro pinchazo, todos terminaron la prueba. Los más entrenados no tuvieron muchas dificultades en acercarse a la meta. A las 9.45 horas llegaban los primeros. Los demás fueron llegando despacio. Unos a pie, arrastrando las bicis por la mano, otros con energía suficiente para seguir pedaleando. "Esta última cuesta fue la más difícil. La etapa final siempre es la más dura", dice María Jesús.

Al final, el cansancio era el sentimiento común, pero todos consideraban que había merecido la pena pedalear, como explica Carlos: "Poder pasar por la Puerta de Alcalá, la Gran Vía, todo sin coches… ha sido muy divertido. Si el año que viene lo organizan otra vez, seguro que estaré aquí."

Fuente: elmundo.es