El Comité de Bici Urbana Guardabarros considera inapropiado que el Ayuntamiento de Salamanca decida unilateralmente la ubicación de las estaciones del nuevo sistema de bicicleta pública. Una vez más no se ha tenido en cuenta la experiencia de asociaciones ligadas al uso y la promoción de la bicicleta en Salamanca, y ello redunda en una política de la movilidad sostenible donde paradójicamente la participación es esencial para alcanzar objetivos reales a medio y largo plazo.
Desde hace más de 15 años, el Comité de Bici Urbana lleva trabajando para promover y extender entre la población salmantina las ventajas de la bicicleta. Ello ha sido posible no solo gracias a las semanas de la bici o la participación en foros y eventos tanto lúdicos como técnicos ligados al mundo de la bicicleta, sino también a través de numerosos informes que los miembros del Comité han realizado desinteresadamente y presentado al Ayuntamiento sobre aparcamientos bici y redes de carriles bici.
En este sentido, debemos recordarle a la corporación municipal que la postura del Comité siempre ha sido de colaboración, desde el diálogo y el debate, con el fin de mejorar las infraestructuras existentes y futuras, así como la consolidación de campañas en favor de la bicicleta. Hasta día de hoy, las reuniones o puentes de colaboración siguen sin existir. De hecho, Guardabarros lamenta una vez más que no se haya contado nunca con su experiencia durante la celebración de la Semana de la Movilidad Europea o el día de la bici.
Creemos que los avances de los últimos años para que Salamanca tenga una red de carriles bici deben ir acompañados de la participación del mayor número posible de agentes sociales. Las infraestructuras son necesarias pero también su puesta en valor.
La semana de la bici, celebrada ya en más de 8 ocasiones, es un evento entre cuyos objetivos figura la dinamización de la red ciclista actual. Sin duda la creación de un sistema público de préstamo de bicicletas puede representar una piedra angular en la expansión de este medio de transporte sostenible en nuestra ciudad.
Las 12 ubicaciones con más de 150 bicicletas previstas por el Ayuntamiento representan uno de los puntos más delicados en el diseño de estos sistemas.
La correcta ubicación de las estaciones de préstamo determina en gran medida el comportamiento de la demanda de bicicletas. En aquellos casos donde las estaciones no tengan demanda, bien por su lejanía o falta de usuarios, se corre el riesgo de abandono, vandalismo y, en consecuencia, de aumento de la percepción negativa hacia estos sistemas.