Más de 16.000 personas, entre alumnos, profesores y personal de administración y servicios de los campus de León y Ponferrada, serán susceptibles de participar en este proyecto de investigación, que se realizará a partir de los datos recogidos por 70 dispositivos de GPS que instalarán en otras tantas bicicletas y que formarán parte de un servicio de préstamo de éstas.
Así lo ha dicho a EFE Arsenio Terrón, el director de la Oficina Verde de la Universidad de León, un departamento que se creó hace dos años precisamente para fomentar actuaciones que velen por el medioambiente.
El objetivo de este estudio será doble, ya que no sólo permitirá conocer el ahorro energético exacto de un determinado usuario de una bicicleta, sino conocer las rutas más frecuentes de los miembros de la universidad.
Esto será útil a la hora de diseñar carriles bici, teniendo en cuenta que los universitarios son los que más suelen usar este tipo de transporte a pedales, o incluso para desarrollar un plan de movilidad integral por la ciudad, conociendo que rutas son las más frecuentes.
En este estudio, se preguntará a los usuarios antes de coger la bicicleta, en qué se mueven habitualmente por la ciudad, si en transporte público, en coche o a pié, con el fin también de tener en cuenta más detalles a la hora de hacer los cálculos.
La investigación, que durará dos años, comenzará el próximo día 23 de marzo y servirá a las administraciones para el desarrollo del plan de movilidad por la ciudad, así como el diseño de rutas de bicicleta.
La investigación se realiza en colaboración con el Ente Regional de la Energía (EREN), dependiente de la Junta de Castilla y León, el Instituto para la Diversificacion y Ahorro de la Energía (IDAE), de la Administración central, y la empresa Proconsi, una empresa especializada en desarrollo de tecnologías e informática.
El próximo día 23 de marz, se pondrá en marcha un servicio de préstamo de 150 bicicletas en la Universidad, de las que 70 participarán en el estudio.
Durante este último medio año se han dado los pasos preliminares para diseñar este proyecto innovador que permitirá conocer datos reales de ahorro de toneladas de CO2 a la atmósfera, lo que será útil para prevenir el cambio climático, según ha explicado a EFE el catedrático de Ecología de la Universidad de León, Estanislao de Luis Calabuig.
Lo único que tienen que hacer los participantes es usar la bici para moverse como lo harían habitualmente.
A estos, se les garantiza el anonimato, de acuerdo a la Ley de Protección de Datos.
En el estudio, se ha incluido a toda la comunidad universitaria, no sólo a los alumnos, ya que los profesores y el personal de administración son los que más se suelen mover en coche, frente a los primeros que optan más por el transporte público, por lo que se estima que el resultado del estudio será más completo.
Cada mes se elaborarán informes sobre los datos obtenidos por estos 70 GPS,s.
Fuente: abc.es