Los franceses tendrán ayudas por acudir al trabajo en bici

El Gobierno de François Hollande ha recibido este martes la luz verde de la Asamblea Nacional a su ambicioso proyecto de Transición Energética.

http://ep00.epimg.net/elviajero/imagenes/2013/05/08/actualidad/1368005743_175109_1368032864_noticia_normal.jpg

 

A las grandes líneas de la ley, que prevé reducir a la mitad el consumo de energía en 2050 y convertir Francia en la campeona europea de la ecología, se han añadido medidas novedosas de gran simbolismo. Entre ellas, las de facilitar a las empresas que abonen dinero a sus empleados por utilizar la bicicleta para acudir al trabajo, a razón de 25 céntimos el kilómetro, aproximadamente, si bien aún no se ha fijado el precio. A cambio, esas empresas verán reducidas sus cotizaciones sociales. Las compañías de más de cien empleados tendrán que presentar un plan que promueva el transporte público, el coche compartido o la bicicleta. Las bolsas de plástico de un solo uso estarán prohibidas a partir de enero de 2016, pero también los cubiertos y vajillas de ese mismo material a partir de 2020.

Fomentar el uso de la bicicleta se ha convertido en Francia, y más específicamente en París, en una prioridad. La capital prevé reservar cada vez más espacios para aparcar el vehículo de dos ruedas y las empresas —y los trabajadores— van a obtener ventajas si promocionan su uso. El transporte, responsable del 27% de la emisión de gases de efecto invernadero, va a ser mucho más limpio dentro de unos años en Francia gracias a la Ley de Transición Energética que ha lanzado la ministra de la Ecología Ségolène Royal. Además de los siete millones de enchufes que se van a instalar (ahora solo hay 10.000) de aquí a 2030, los particulares se beneficiarán de una prima (que puede llegar a los 10.000 euros) si cambian su coche de diésel por uno eléctrico. La flota estatal debe ir renovándose con este tipo de vehículos en una proporción de uno de cada dos nuevos que compre y las empresas de transportes, en uno de cada diez.

La ley, que ha sido aprobada por amplia mayoría en la Asamblea (314 votos contra 219), prevé aumentar las fuentes renovables hasta que supongan el 40% del total, reducir el uso de combustibles fósiles en un 30% en quince años, renovar los edificios para ahorrar energía y reducir a la mitad los deshechos para 2025.

Fuente noticia completa: elpais.com