La Universidad de Sevilla ha comenzado a instalar puntos de autorreparación de bicicletas en los aparcamientos de los que dispone en sus diferentes campus para el estacionamiento de ciclos, una experiencia pionera en Sevilla y, en todo caso, con escasos antecedentes a nivel español.
El director del Servicio Integral de la Bicicleta de la Universidad de Sevilla (Sibus), Ricardo Marqués, ha expuesto que el primer dispositivo, consistente en un poste diseñado para poder colgar la bicicleta con herramientas fijadas con cableado y una bomba de aire, ya está disponible en el estacionamiento ciclista de la Facultad de Matemáticas. “Es una herramienta que ya se está utilizando en otros países y que tenemos previsto ir colocando poco a poco en la Universidad de Sevilla”, ha explicado Marqués.
Por el momento, al artilugio ya instalado en el campus de Reina Mercedes se sucederá de forma inminente otro en el entorno de Ramón y Cajal, ambos como experiencia piloto para medir la respuesta de los usuarios y definir los términos del futuro proceso de implantación, aún sin un horizonte temporal concreto. La colocación en aparcamientos cerrados busca evitar actos vandálicos que también impide el propio diseño del sistema, según ha precisado el responsable del Sibus, que ha hecho hincapié en la “evidente” apuesta por la sostenibilidad que la Hispalense demuestra al amparar este proyecto.
La iniciativa, cuya inversión es “asumible”, iría en principio costeada por la propia Universidad de Sevilla, si bien se está en conversaciones con empresas e instituciones —se cuenta ya con alguna oferta, dado lo “llamativo” de la actuación— para poder patrocinar mediante ‘sponsors’ la instalación.