El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Salamanca tarda año y medio en presentar el proyecto del nuevo plan de seguridad vial con medidas en 30 áreas.
El voluminoso documento se ha mostrado en fase de estudio y al consenso, sin cerrar pero muy definido a la espera de aportaciones de vecinos y grupos de la oposición. Llega, eso sí, con muchos meses de retraso. Su origen es el pacto por la seguridad vial que ofreció Alfonso Fernández Mañueco en octubre de 2016 y que se concretó en un primer borrador presentado en febrero de 2017; así que ha habido que esperar año y medio para ver algo concreto. De hecho, las medidas son un desarrollo de lo presentado en febrero de 2017.
En cuanto al elenco de medidas, se refieren a 30 ámbitos. Entre las más destacadas, la instalación de 17 nuevos semáforos, la eliminación de los denominados bifocales (aquellos en los que está, a la vez, verde para peatones y amarillo para coches), avisadores acústicos para ciegos en los 274 semáforos de la ciudad, nuevas balizas luminosas en 17 pasos de peatones, nuevos paneles informativos, nuevos radares portátiles y más cajas de radar, paneles de velocidad, luces para delimitar separación de carriles en Canalejas o la reducción de velocidad a 20 km/hora en 15 calles y a 30 en toda la zona entre Gran Vía y Canalejas y varios barrios.
Estas son todas las medidas.