Publicado en la prensa: La organización Guardabarros considera que Salamanca es «posiblemente la ciudad de Castilla y León con políticas anticiclistas más severas»
Hace pocas fechas que los usuarios de la bicicleta han recuperado el aparcamiento de bicis de la calle de La Fe, uno de los lugares clave para quienes se desplazan al centro de la ciudad. Fue retirado con motivo de las procesiones de Semana Santa y durante meses no han contado con alternativas cercanas hasta que el Ayuntamiento no lo ha vuelto a instalar.
Pero todavía quedan por colocar otros aparcamientos que se han quitado, para desesperación de quienes se desplazan en bici por esta zona de Salamanca, algunos de ellos para ir a trabajar. Faltan los de Anayita, en la Puerta de Zamora y al final de la calle Libreros. Desde el Consistorio reconocen que «se van quitando de forma temporal porque están en el recorrido de carreras populares (o procesiones en Semana Santa), evitando así que haya obstáculos durante el trayecto».
El problema es que después tardan meses en volver a instalarse. Algo impensable si se tratase de lugares de estacionamientos para vehículos a motor. Y quienes se buscan la vida para dejar la bici en otros lugares no habilitados ante la falta de sitios mejores se arriesgan a que se la lleve la grúa.
El Comité de Bici Urbana Guardabarros considera que Salamanca es «posiblemente la ciudad de Castilla y León con políticas anticiclistas más severas». En esta línea se quejan de que «ninguna concejalía muestra ningún tipo de sensibilidad» y que únicamente la Oficina de Ingeniería Civil del Ayuntamiento se toma en serio sus reivindicaciones y resuelve en la medida de lo posible.
Ubicaciones estratégicas para no molestar
Para este colectivo, la recuperación rápida de estos aparcamientos cuando sea necesario retirarlos es fundamental. Destaca que están ubicados en lugares estratégicos para que los usuarios de la bici puedan acercarse suficientemente al centro sin que tengan que llegar a las calles más concurridas, en las que pueden llegar a molestar a los peatones. Estos estacionamientos están concienzudamente estudiados en los perímetros de calles comerciales y zonas históricas con el objetivo de no entorpecer ningún tipo de tráfico, de actividades económicas, de terrazas, etcétera.
Desde Guardabarros aseguran que con este tipo de aparcamientos no se alcanza, ni mucho menos, el mejor de los escenarios posibles para los ciclistas salmantinos, ni se sigue la estela de otras ciudades europeas con verdaderas medidas para facilitar la movilidad de las personas que usan la bici. Son solo «una alternativa intermedia, ni para ti ni para mí» ante el desprecio que se hace a la bicicleta desde el Ayuntamiento. Pero aun reduciendo expectativas, no se respetan estos pequeños logros que tienen que seguir reivindicando para que no se queden en el olvido.
Disponer de aparcamientos cómodos es un aspecto esencial para potenciar el uso de la bicicleta. Además, estos deben ser seguros y ubicarse en zonas de paso, bien visibles para los transeúntes y con buena iluminación nocturna.
Sin ellos, entre otras medidas, no sirve de mucho sumar kilómetros de carriles bici. Quitarlos es poner cerco a este medio de transporte. En otras ciudades patrimonio Unesco, en países como Francia e Italia por ejemplo, hay muchos aparcamientos para bicis en sus centros históricos. No en vano se busca con ello facilitar la movilidad. Pero en Salamanca todavía se trata como «fea y antipática».
Corredores en la Zona de Bajas Emisiones
Hace unos meses, el concejal de Transportes, Ángel Molina, le propuso a Guardabarros que plantee una alternativa a los famosos corredores en la Zona de Bajas Emisiones (ZBE). Según explican desde el Comité de Bici Urbana, se trata de «lugares por donde ellos quieren que pasen la mayor parte del reparto en patinetes, bicicletas, bicicletas eléctricas, y posiblemente motos también. Quieren garantizar el transporte de vehículos de movilidad personal (VMP), para mantener la actividad comercial de venta a través de unos corredores preferentes que vayan de Norte a Sur y de Este a Oeste» pero definiendo los trayectos.
La organización lleva trabajando en ello desde hace varias semanas, pero aseguran que no lo tienen claro «porque hay que definir los trayectos en una dirección y en otra; de Norte a Sur y de Sur a Norte; los trayectos de entrada a la almendra central a través de la ZBE y los de salida y no es lo mismo. Muchas veces hay que trazar diferentes trayectos para las salidas y las entradas».
Todo ello resulta una especie de encaje de bolillos. Pero lo que más inquieta a Guardabarros es que en ningún momento hablan de bicicletas como medio de transporte de personas. «Es más, yo creo que esa política ahora mismo, pese a que la bicicleta es una herramienta climática no la incorporan en esa fórmula. Ellos lo que quieren es garantizar la venta de comida a través de esas empresas que contratan a gente y del transporte de personas no quieren saber absolutamente nada».
Además plantean que si no hay carriles bici segregados en la almendra segregados «habrá que habilitar espacios de convivencia, por lo menos en los momentos de carga y descarga. Ya no digo todo el día, que sería lo ideal. Si conseguimos eso en esta ciudad ya sería una victoria».
En esta línea reitera que «si conseguimos que cualquier policía local, se levante como se levante, nos deje circular libremente durante la carga y descarga sería una victoria. Aunque si se mira desde el deseo de una eficiente movilidad urbana sería una derrota. Pero en este contexto tan antagónico, retrógrado y atávico respecto a la bicicleta por parte de los responsables municipales sería toda una victoria», insisten.
La propuesta de los corredores todavía no está terminada por la citada complejidad de su diseño, pero se la harán llegar al concejal cuando esté lista.
En cualquier caso, desde Guardabarros recuerdan que entre las directrices del Ministerio de Transición Ecológica para la creación de Zonas de Bajas Emisiones se marca la potenciación de la movilidad activa, y se especifica también que han de llevarse a cabo medidas de transformación y mejora de la red de transporte público, red peatonal y red ciclista. Pero lamentan con impotencia que en Salamanca «se van buscando todos los subterfugios para que no avance».
Publicado: www.salamancahoy.es